Ordenando los cajones de la cocina me he dado cuenta que casi no le doy uso a un cortador de galletas que me regalaron hace años. Así que pensando pensando he descubierto un nuevo uso para él: sirve como patrón para hacer broches o cualquier otra manualidad que queramos.
Adjunto unas fotos con el resultado de los primeros broches que me he lanzado a hacer en fieltro.
Prometo mejorar con la práctica.
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